viernes, 20 de noviembre de 2020

¿Le seguirá Lindor los pasos de Betts ahora?



 Por Mike Lupica/MLB.com

Si los Indios deciden cambiar a Francisco Lindor en este receso de temporada a un equipo contendiente, el puertorriqueño podría convertirse en el próximo Mookie Betts. Lindor podría ser la clase de estrella joven que se carga sobre sus hombros a su nuevo equipo. Y si cambia de conjunto, lo estará haciendo a la misma edad de Betts (27 años) cuando el jardinero salió de los Medias Rojas para unirse a los Dodgers.

Eso no significa que Lindor sea Betts. Pero no es una locura ponerlos en la misma conversación, incluso si uno es campocorto y el otro es el mejor guardabosque derecho del deporte.

Betts ha jugado en dos Series Mundiales y sus equipos han ganado ambas, gracias en parte a que los dos conjuntos han contado con un talento que no tiene nada que envidiarle a campeón reciente alguno. Los Indios de Lindor han disputado una, en el 2016, cuando no pudieron sostener una ventaja de tres victorias a una en una serie que terminaron perdiendo en la 10ma entrada del Juego 7 ante los Cachorros. Betts tiene un premio de Jugador Más Valioso de la Liga Americana y terminó entre los primeros tres en la votación del 2020 en la Liga Nacional. ¿Lindor? Ha jugado seis años en las Mayores –uno menos que Mookie—y ha estado dentro de los primeros seis para JMV de la Americana en dos ocasiones y una vez terminó entre los primeros 10.

Si tuvieras que elegir, te inclinarías por Betts sobre Lindor y tal vez sobre cualquiera, a excepción de Mike Trout. Igualmente, ambos son jugadores dinámicos que llevan alegría al juego. El oriundo de Caguas ha promediado 23 jonrones por campaña desde que llegó a los Indios en el 2015. Betts ha dado 22 por temporada, junto a un promedio de bateo de .301 en su carrera. Lindor ha bateado .285. Betts promedia 94 anotadas por año, Lindor 84, con menos ayuda que la que ha tenido Betts de su equipo.

El OPS de por vida de Betts es de .895, mientras que el de Lindor es de .833. Hasta ahora –y ciertamente tras la Serie Mundial—sabemos que Betts puede cambiar el juego desde el comienzo hasta la postemporada, siempre con una sonrisa. ¿Lindor? Es conocido como el “Señor Sonrisa”. Lindor y los Indios tuvieron su oportunidad en el 2016 y al año siguiente parecían ser nuevamente los favoritos, pero desperdiciaron una ventaja de 2-0 en la Serie Divisional de la Liga Americana contra los Yankees.

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Claro, no hay garantías de que los Indios vayan a canjear a Lindor. Aunque cada vez más parece que sí lo harán, un año antes de que el torpedero será elegible para la agencia libre, siendo la misma situación que tenía Betts hace un año. Betts era la cara de los Medias Rojas luego del retiro del dominicano David Ortiz. Lindor ha sido el rostro sonriente de la franquicia de los Indios, con una carrera en la que acumula cuatro convocatorias al Juego de Estrellas, dos Bates de Plata y dos Guantes de Oro.

Los Medias Rojas decidieron que no le pagarían a Betts por los próximos 10 años (resultó ser más con Los Ángeles), así que lo cambiaron. Los Indios parecen haber llegado a la misma conclusión sobre Lindor.

Tal vez Lindor haya llegado al mismo lugar en que estaba Betts antes de salir de Boston: Un jugador especial que está en su mejor momento y que está cerca de llegar a un nuevo equipo, uno que probablemente lo lleve a la cima. Mandy Bell, quien cubre a los Indios para MLB.com, mencionó cuatro posibles destinos para Lindor: Yankees, Mets, Azulejos y Filis.

“Tiene la habilidad y la personalidad”, dijo el exgerente general de los Mets, el dominicano Omar Minaya. “Primero, la habilidad. Es versátil, rápido, con buenos instintos, capaz de utilizar su pequeño cuerpo de 5-pies-11-pulgadas y 190 libras (1.80 metros y 86.2 kg) y batea la bola con autoridad. Pero por encima de todo, es como Mookie en cuanto a la personalidad y en hacer mejores a quienes lo rodean”.

Los Yankees son el equipo más intrigante en este caso, si de verdad están entre los candidatos. Tienen a Gleyber Torres, un campocorto que tienen bajo control contractual. El venezolano conectó 37 cuadrangulares en el 2019, antes de tener problemas en el 2020, disputando sólo 42 de los 60 juegos de Nueva York--en los que empalmó apenas tres bambinazos. Eso no debe de ser un problema para los Yankees; Torres luce como un intermedista en el campo corto, igual que el segunda base DJ LeMaheiu, quien ha sido el mejor jugador en el Bronx en los últimos dos años.

LeMahieu, de 32 años, ahora es agente libre. Está la interrogante sobre cuánto dinero los Yankees le deberán pagar y cuántos años estarán dispuestos a ofrecerle, dado el momento de su carrera. Claro, siempre estarán balanceando su nómina, entendiendo lo que le tienen que pagar a Giancarlo Stanton, a quien le deben US$218 millones hasta la temporada del 2027.

¿Podrán los Yankees firmar a LeMahieu y adquirir vía cambio a Lindor, de la manera en la que hicieron los Dodgers con Betts? Sólo ellos saben si están dispuestos a eso. ¿Estarán dispuestos a incluir a Torres, quien no cumplirá 24 años hasta dentro de unas semanas, en un canje por Lindor? Yo lo haría, por la misma razón por la que los Dodgers fueron por Betts: Porque el boricua es así de bueno, de joven y está disponible para ayudarlos a finalmente ganar otro campeonato.

¿Significa eso que Lindor es Betts? No. Pero, ¿puede ser la versión de Betts del 2021? Ténganlo por seguro.

Mike Lupica es columnista de MLB.com.

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