Los Cleveland Indians anunciaron el miércoles dos noticias importantes. Una buena y una muy, muy mala.
Un día antes de jugar su primer partido de la temporada, contra los Minnesota Twins en el Target Field, Cleveland informó que el dominicano Hanley Ramírez, quien llegó a los entrenamientos primaverales como un invitado sin puesto en el roster regular, estará en el club al inicio de temporada.
Pero la verdadera noticia que podría afectar el futuro inmediato de Cleveland en la batalla por el banderín de la División Central de la Liga Americana es la que involucra al torpedero Todos Estrellas y candidato al Jugador Más Valioso, el puertorriqueño Francisco Lindor.
Lindor, quien estaba programado para comenzar la temporada en lista de lesionados con una lesión de corva, sufrió un esguince agudo de tobillo mientras corría las bases durante un partido de ligas menores el martes, informó el club.
Lindor fue sometido a una resonancia magnética y aún está por determinarse la gravedad de la lesión y el tiempo que necesitaría para rehabilitarse. El dominicano Erik González, quien en el pasado figuró como la segunda opción en el campocorto, fue cambiado a los Pittsburgh Pirates, donde será regular.
En lugar de Lindor, Eric Stamets, un veterano de siete años en ligas menores, comenzará el jueves en el campocorto contra los Twins.
Debido a la presencia de Lindor y el antesalista dominicano José Ramírez, los Indians son favoritos para ganar su cuarto título consecutivo de la División Central de la Liga Americana, pero los Twins hicieron una serie de movimientos durante la temporada muerta que ayudaron a reducir notablemente la distancia que había entre ambos.
Cleveland pasó un gran susto el domingo cuando Ramírez se golpeó la rodilla izquierda con un foul y tuvo que ser sacado del campo en un carrito, durante un partido de exhibición. Sin embargo, el pelotero regresó al campo el martes y se declaró listo para jugar.
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