HIT & RUN
Por Antonio “Toño” Soler
Orlando, Florida.
A medida que se acerca el 23 de julio, fecha pautada para el inicio de la temporada 2020 de las Grandes Ligas, y en vista de los cambios introducidos para ella antes de la pandemia de la covid-19 y durante la misma, han surgido dos divisiones entre los amantes de la disciplina.
Se trata de los fiebrúos, palabra coloquial para definir a las personas apasionadas con algo, en este caso el beisbol, entre quienes nos incluimos; y los criticones, quienes no ven con buenos ojos nada de los esfuerzos para tratar de tener un campeonato, a pesar de todo lo que está situación ha causado en el comportamiento del mundo entero.
Para el primer grupo, poder disfrutar de nuestro máximo pasatiempo sería una victoria en estos tiempos tan difíciles. Imaginemos que se pudieran concentrar los treinta equipos en una sola ciudad y con un solo estadio y en el mismo se juegue un campeonato relámpago, similar al formato de un Campeonato Mundial o Nacional y cada equipo tenga que jugar en grupos de cinco, un juego contra cada uno de sus rivales, clasificando a la siguiente fase los dos primeros y cuatro de los mejores terceros para tener dieciséis equipos.
En esa fase los juegos serían de eliminación directa, el ganador pasa a octavos y después a semifinales, hasta llegar a una final. ¿Sería o no sería interesante? ¿Les gustaría verlo o no? Como les decía, a mí si, por lo que no le restaría ningún mérito, porque aunque suene jocoso decirlo, estoy tan ávido de beisbol que hasta si juegan tres innings por partido me harían el espectador más feliz, mucho más si ese espectáculo lo disfruto en el estadio donde lo realicen.
Ahora bien, si están prometiendo 60 juegos en estas circunstancias, ¿por qué volvernos profetas del desastre, si en Japón y Corea del Sur están jugando y también han encontrado casos positivos de covid-19? Confiemos en las medidas que han acordado la MLB y la MLBPA, respetemos a quienes quieren jugar y a quienes no, todos tienen una razón. Lo que sí es cierto, desde nuestro punto de vista, es que la reanudación de la NBA junto al comienzo de la Gran Carpa ayudarán a sus seguidores a quedarse en casa y desde allí disfrutar de su deporte, mientras, con la ayuda de Dios, encontramos la solución para vencer al coronavirus.
Detrás quedará ver si las medidas de corredor en segunda en los extrainnings, los relevistas para tres bateadores como mínimo y la base por bola automática son anti béisbol. Los fiebrúos queremos ver aunque sea un torneo modificado. Y eso no quiere decir que por no estar de acuerdo con ellos no respetemos a los criticones.
Será hasta la próxima, Dios mediante.
(Toño Soler es un periodista zuliano con casi tres décadas de trabajo en los medios de comunicación. Su voz como comentarista del circuito de las Águilas es una de las más características, y su análisis uno de los más claros, en la LVBP. Comenzó a publicar su columna en El Emergente desde 2020.)
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