Osaka, Japón. - Recientemente, tuvimos la oportunidad de platicar en el Kyocera Dome de Osaka con el jugador colombiano de los Búfalos de Orix Jordan Díaz, quien tuvo la gentileza de compartir con nosotros las impresiones que ha tenido hasta ahora trabajando en el béisbol japonés.
Díaz está debutando este año en la NPB
Su proceso de adaptación a la liga no ha sido fácil, pero la experiencia lo ha ayudado a conocerse mejor a sí mismo y esa es la mayor enseñanza que ha logrado obtener de esta aventura.
El apoyo que ha recibido de sus compañeros latinos de equipo ha sido invalorable y no podría estar más orgulloso del progreso que ha logrado el béisbol colombiano en los últimos años, tanto en las Grandes Ligas como en Japón, donde tiene ahora 3 representantes.
Estás debutando este año en el béisbol japonés. ¿Qué tal ha sido la experiencia hasta ahora?
Muy buena. Me siento muy agradecido por la oportunidad de estar aquí ya que muy pocas personas tienen la oportunidad de venir a jugar en esta liga. Cuando vine a Japón llegué con una expectativa, ya que me habían hablado mucho del país, y la misma se ha cumplido, me he sentido muy bien hasta ahora. Comencé un poco lento, pero bueno eso es parte de mi proceso de adaptación a la liga. Yo sigo trabajando duro y aprendiendo un poco más con cada día que pasa. Ese enfoque para mí es muy satisfactorio, ya que al final siempre me da buenos resultados.
¿Cuál ha sido el obstáculo más grande que has encontrado en tu proceso de adaptación a Japón? ¿Qué es lo que más te ha costado hasta ahora?
Bueno, lo que más me ha costado ha sido adaptarme a los lanzadores japoneses, ya que sus movimientos son muy diferentes a los que he visto en el béisbol que yo he venido jugando hasta ahora. Sus pitcheos son muy buenos, pero como te digo yo he venido trabajando en eso, he venido enfocándome y haciendo los ajustes necesarios. Al principio ese aspecto me afectó bastante, pero ya he podido salir adelante.
¿Qué es lo más interesante que has aprendido hasta ahora jugando en la NPB?
Conocerme a mí mismo. Yo he venido pasando muchas dificultades desde que llegué porque esta es mi primera experiencia en Japón, pero mi mayor satisfacción hasta ahora es que a pesar de todo he logrado salir adelante y eso me motiva a seguir trabajando duro, por mí, por mi familia y por la bandera de Colombia. Para mí siempre es un orgullo representar a mi país, así que seguiré dando la batalla hasta el final, pase lo que pase.
Tienes la ventaja de estar en un equipo con otros jugadores latinos que te pueden ayudar a adaptarte más rápido. ¿Cómo ha sido la experiencia de compartir con ellos?
Muy buena, ya que los muchachos tienen uno o dos años jugando aquí y saben cómo funciona todo. Cuando llegué me explicaron cómo son las cosas y me dieron varios consejos para que yo los pusiera en práctica. De verdad que este ha sido un año muy bueno para mí, porque he aprendido a conocerme a mí mismo, he aprendido a valorar las cosas, he venido trabajando duro y esforzándome día a día y eso para mí es muy satisfactorio. Hay momentos en que los muchachos también me dan aliento, me dicen vamos, que nosotros también pasamos por malos momentos cuando llegamos y eso me motiva mucho a seguir adelante.
¿Qué tal ha sido la experiencia de jugar en la NPB al mismo tiempo que tus compatriotas Jeter Downs y Tayron Guerrero? El béisbol colombiano nunca había tenido tantos representantes en esta liga.
Muy buena, ya que he podido compartirla con otros colombianos. Me siento muy contento por Colombia, porque hemos venido de menos a más. Ya tenemos más colombianos en las Grandes Ligas, más colombianos aquí en la liga japonesa y espero que el número de nuestros compatriotas siga aumentando en ambos circuitos. Nuestro béisbol tiene un gran nivel, lo hemos demostrado en los Clásicos Mundiales y en la Serie del Caribe y mi deseo no es otro que mis compatriotas sigan triunfando en las mejores ligas de béisbol del mundo.
Finalmente, ¿qué te parece Japón como país? ¿Te gusta su cultura y su comida?
Japón es un país fantástico. Me gusta mucho su cultura, su comida y sobre todo el gran trato que me da la gente aquí. De verdad que los japoneses me han acogido muy bien, así que me siento muy contento de estar aquí. Eso me da mucha tranquilidad, ya que no siento presión. Los japoneses me han ayudado a aprender un poco más de mí mismo y eso ha sido muy bueno para mí.
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