El arranque de la última pretemporada de Miguel Cabrera en las Grandes Ligas no ha sido el mejor. Al menos, eso dicen las estadísticas de sus dos primeros compromisos de práctica en el Spring Training ante Phillies de Filadelfia y Orioles de Baltimore.
En cada uno de estos duelos tuvo dos turnos al bate, en los que aún no ha conectado su primer imparable ni ha tocado la primera base. Esto deja un balance total de 4-0 en las participaciones del venezolano ante el plato.
Los Tigres de Detroit ganaron su primer juego amistoso con resultado de cuatro carreras por dos, mientras que el segundo finalizó con derrota por diez rayitas a seis. Cabe destacar que en ninguno de los turnos de Cabrera hubo ponche.
Estas malas actuaciones contrastan fuertemente con sus estadísticas a nivel vitalicio, las cuales lo posicionan como uno de los mejores jugadores de la historia de Las Mayores al conectar 3088 imparables, 507 bambinazos e impulsar 1847 carreras.
No obstante, también muestran que el veterano de 39 años está llegando al ocaso de su carrera. En su última campaña, solo logró 101 imparables y la sacó del parque en cinco ocasiones, su segundo peor registro de jonrones en su trayectoria.
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