Lo que se evidencia de su poderío de contacto deja en una posición bastante incómoda al jugador.
En la historia de Sansón se enmarca como el hombre de grandes músculos podría con solo sus manos despedazar a un león, viendo un cambio radical y la pérdida de su fuerza cuando su mujer, Dalila, contó el secreto de que la fuerza de Sansón provenía de su cabello, que terminarían cortando los filibusteros.
Algo parecido ha pasado con el rendimiento del jugador de los New York Yankees, Gleyber Torres, quien luego de una temporada exitosa en 2019 parecía ser una estrella naciente del juego, frente al resultado de todo lo opuesto por su desempeño en 2020 y 2021 dentro de las Grandes Ligas.
Durante 2019, Torres, fue capitalizador de 125 Carreras Ponderas Creadas Plus (wRC+) y un OPS+ de 128, lo que parecían sólidos registros por encima del promedio. Toda esta exclusividad no tardó mucho para irse abajo, dos campñas después en 2021 el jugador tuvo un wRC+ de 94 y un OPS+ de 93, ambos registros por debajo al promedio de la liga.
Entre 2020 y 2021 el jugador de 24 años ha sufrido lesiones desde su pulgar como los isquiotibiales izquierdo, lo que ya lo pone en condición desfavorable.
Unas de las principales causas registradas en la baja de su rendimiento se ve fuertemente expresada sobre sus porcentajes de contactos de Barrels. Un barrel son todas aquellas bolas bateadas a una velocidad mayor a 98 millas por hora y un ángulo de golpe entre 26 y 30 grados.
Tras la campaña del 2021 la MLB tuvo como media (promedio de la liga) en porcentajes de contactos de Barrel de 7.9%, mientras que Torres registró tan solo un 7.8%, alarmantes resultados en las tasas de sus contactos contra pitcheos de alta velocidad.
Este bajo promedio no es para nada algo que pasó así por así, siendo Gleyber Torres un jugador que en 296 apariciones al plato contra bolas rápidas en 2021 tan solo tuvo promedio de bateo de .230; en 310 apariciones en 2019 su promedio fue de .292 contra dichos pitcheos.
Estos resultados que evidentemente llaman al alarmismo, teniendo reacciones de un rendimiento catastrófico contra los pitcheos que más usan en su contra (y es el caso de todos los bateadores), lo que lo convierten en un ser demasiado vulnerable desde el plato.
Otro punto que puede confirmar una naciente teoría de que “Gleyber Torres como Sansón perdió su fuerza” ha sido la velocidad de salida de la pelota cuando éste hace contacto, teniendo en 2021 una velocidad de salida de 87.1, siendo 88.8 la media de la liga, por lo que incluso la velocidad con la que golpea la pelota evidentemente que deriva la razón a todo lo anterior.
El bajón en su poderío ha sido estrepitoso, sumando mayores dificultades a su juego sin antes olvidar el ya problema que arrastra en su defensa. Lo que se evidencia de su poderío de contacto deja en una posición bastante incómoda al jugador.
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