Kris Bryant solo ha jugado 170 partidos en sus cuatro temporadas con los Rockies, y en la campaña de 2025 apenas participó en 10 antes de que sus recurrentes problemas de espalda pusieran fin a su temporada prematuramente. La enfermedad degenerativa de disco lumbar le provoca dolor al realizar prácticamente cualquier actividad relacionada con el béisbol que no sea batear, y el ex MVP de la Liga Nacional le comentó a Patrick Saunders del Denver Post que esta molestia ahora afecta su vida diaria.
“ Me agota despertarme con la esperanza de sentirme mejor” , dijo Bryant. “ No recuerdo la última vez que me desperté sintiéndome bien… Si me lo hubieras preguntado hace dos o tres meses, te habría dicho que [el dolor de espalda] no afectaba mi vida diaria. Pero ahora sí, lo cual me molesta mucho porque normalmente, con descansar, se supone que mejora. Así que quizás debería intentar hacer varias cosas para ver si me ayudan ”.
Bryant ya ha explorado diversas opciones para intentar solucionar su problema de espalda, incluyendo una ablación el pasado mayo. Actualmente no participa en ninguna actividad relacionada con el béisbol, ya que el entrenador principal de los Rockies, Keith Dugger, le ha impuesto un programa regular de Pilates para fortalecer su zona abdominal. Sin embargo, aún está por verse si este tratamiento, o cualquier otra intervención, logrará que Bryant regrese a la actividad regular en el campo, que sigue siendo su objetivo.
“ Eso es lo que más me preocupa. Es difícil de explicar ”, dijo Bryant. “ Llevo 30 años jugando a esto, no profesionalmente, claro, pero es lo único que he conocido… Pero ver los playoffs y a algunos amigos todavía jugando me motiva a intentarlo. Así que, gracias a Dios, no tengo esas conversaciones [sobre el retiro], porque no quiero. Solo quiero ser jugador de béisbol ”.
A Bryant le quedan tres años y $78 millones de su contrato de agente libre de siete años y $182 millones que firmó con Colorado durante el receso de temporada 2021-22. Lamentablemente, esta firma puede considerarse uno de los mayores fracasos en la historia de los agentes libres, dado el poco tiempo que Bryant ha jugado y su escasa producción cuando lo ha hecho (.244/.324/.370 y 17 jonrones en 712 apariciones al plato con el uniforme de los Rockies). El pésimo récord de 231-417 de los Rockies en las últimas cuatro temporadas no es culpa exclusiva de Bryant, pero su contrato se ha convertido en un símbolo de este punto bajo en la historia de la franquicia.
Un punto de inflexión podría estar cerca, ya que los Rockies buscan un nuevo director de operaciones de béisbol y se centran en candidatos externos en un intento por incorporar ideas frescas y nuevas perspectivas a la organización. Dado el escaso progreso con Bryant, es difícil considerar su situación una prioridad para el nuevo ejecutivo, ya que aparentemente no hay mucho que hacer salvo esperar que Bryant se recupere lo suficiente para jugar.
Un plan de pagos diferidos para el resto del contrato podría ser la solución final para Bryant y los Rockies, ya que, lógicamente, no se retirará de inmediato y renunciará al dinero que aún se le debe. Sin embargo, Bryant (que cumple 34 años en enero) todavía no está listo para tomar esa decisión, y solo él sabe cuándo será suficiente, tanto física como mentalmente.
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