Los Astros comenzaron la temporada baja minimizando la posibilidad de canjear al tercera base Isaac Paredes o al primera base Christian Walker para despejar el estancamiento del cuadro interior creado por el canje de Carlos Correa durante el verano. Sin embargo, informes más recientes sugieren al menos algunas conversaciones con los Medias Rojas sobre Paredes. Chandler Rome, de The Athletic, analizó la situación en Houston con más detalle ayer, señalando que los planes del club de usar a Yordan Álvarez como bateador designado regular y a José Altuve en la segunda base con mayor frecuencia en 2026 dejan al club con opciones limitadas para incluir a Paredes y Walker en la alineación con regularidad. Esto aparentemente indicaría que un canje es probable, pero Rome añadió que el club ha recibido poco interés en los servicios de Walker este invierno.
Esas noticias no son precisamente sorprendentes, dada la floja temporada inaugural de Walker con los Astros. En 154 juegos con Houston, Walker registró una línea ofensiva de apenas .238/.297/.421 con un wRC+ de 99 y un fWAR de 1.1. La temporada no fue del todo mala, ya que Walker bateó .250/.312/.488 después del receso del Juego de las Estrellas. Esa actuación en la segunda mitad le permitió conectar 15 jonrones en 263 apariciones al plato y registrar un wRC+ de 120, exactamente en línea con lo que había logrado en Arizona entre 2022 y 2024, lo que ofrece motivos para el optimismo de cara a la temporada del veterano, que cumplirá 35 años, en 2026.
Sin embargo, incluso con ese optimismo, es fácil entender por qué los clubes rivales no estarían especialmente entusiasmados con asumir los últimos dos años y los $40 millones que se le deben a un primera base veterano que registró números apenas por debajo del promedio de la liga el año pasado, junto con su tasa de ponches más alta y la tasa de bases por bolas más baja desde que se convirtió en titular de la MLB. La menor disciplina de Walker seguramente dificultaría que los Astros obtuvieran una recompensa significativa por sus servicios, lo que podría hacer que el equipo optara por esperar que recupere su mejor forma y, en cambio, escuchar ofertas por Paredes.
Eso sería un duro golpe para la alineación del equipo, ya que Paredes tuvo un rendimiento de .254/.352/.458 (128 wRC+) en 102 juegos antes de quedar fuera por una lesión en el tendón de la corva poco antes de la fecha límite de cambios. Perder ese tipo de impacto ofensivo de una alineación que registró un wRC+ de 100 el año pasado sería difícil, pero una temporada saludable de Álvarez sin duda ayudaría a compensar la pérdida de Paredes, incluso si titulares de calidad como Walker, Correa y Altuve no se recuperan. Eso podría hacer que un intercambio que envíe a Paredes a cambio de ayuda en el pitcheo sea sensato para los Astros, especialmente dado el estancamiento del equipo en el infield.
Con el estelar campocorto Jeremy Peña a solo dos temporadas de la agencia libre y el mercado de campocortos de calidad este invierno extremadamente reducido, se ha especulado sobre su disponibilidad para canjes. Si bien un canje de Rome podría permitir a Correa regresar al campocorto mientras Paredes recupera su tercera base, Rome informa que el gerente general Dana Brown descartó rotundamente esa posibilidad. Cuando se le preguntó si estaba hablando de Peña en las negociaciones de canje, Brown lo negó rotundamente.
"No", dijo Brown, según lo relató Rome. " Su nombre no ha sido mencionado y creo que los equipos entienden que si eres un equipo ganador y buscas volver a la postemporada, no hay forma de que puedas cambiar a tu campocorto titular".
Los aparentes planes del equipo limitan cada vez más las opciones para mantener a ambos jugadores en la primera base, y Rome sugiere que el aprendizaje del jardín izquierdo por parte de Paredes podría ser la única manera de integrarlos a la alineación con regularidad el próximo año. Esto supone que Álvarez será el bateador designado titular y que Altuve regresará a la segunda base con regularidad, como han sugerido Brown y el mánager Joe Espada. Esto dejaría espacio para que Paredes abriera ocasionalmente como segunda base o como bateador designado en sus días libres o durante las raras apariciones de cualquiera de los dos jugadores en el jardín izquierdo, pero no parece probable que se trate de un número significativo de turnos al bate.
La sugerencia de Rome de que Paredes pruebe el jardín izquierdo presenta serios obstáculos. El jugador de 26 años no tiene experiencia en los jardines como profesional, lo que hace que la posibilidad de un traslado al jardín izquierdo parezca bastante remota. Altuve nunca había jugado en los jardines antes de asumir la posición la primavera pasada, pero mudarse a los jardines podría implicar consideraciones adicionales para Paredes tan pronto después de una grave lesión en el tendón de la corva. Quizás se podría distribuir el tiempo de juego entre seis jugadores por cinco puestos en la alineación, incluso sin que Paredes juegue en el jardín izquierdo, aunque Rome señaló que los propios jugadores podrían no estar contentos con que se les pida que se sienten con regularidad.
Volviendo a Walker, si los Astros estuvieran motivados para traspasarlo, Rome sugiere que no es inamovible. Su trayectoria, su veteranía y su sólida segunda mitad seguramente serían suficientes para que sus servicios se vieran afectados en el mercado de cambios, al menos en cierta medida, aunque Houston seguramente tendría que asumir una parte importante de su salario o aceptar una compensación bastante baja para facilitar ese tipo de acuerdo. Los Red Sox, los Mets, los Yankees, los Marlins, los Diamondbacks y los Padres se encuentran entre los equipos que, en teoría, podrían necesitar refuerzos en la primera base este invierno, aunque muchos de esos clubes podrían preferir sus opciones internas a negociar un traspaso por Walker.
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