¿Cómo fue que los Dodgers ignoraron el talento de Roberto Clemente?
A principios de 1954, Clemente concluyó un brillante invierno en la Liga Puertorriqueña con los Cangrejeros de Santurce.
Clemente, entonces de 19 años de edad, era pretendido por al menos seis equipos de MLB y uno de los más interesados eran los Gigantes de San Francisco, pero al enterarse de eso se interpusieron los Dodgers de Brooklyn y el 19 de febrero de ese año lo firmaron con un bono de 10 mil dólares y un salario de 5 mil dólares.
Los Dodgers ya traían en sus filas a Jackie Robinson, Roy Campanella, Gil Hodges, Pee-Wee Reese, Don Newcombe y toda esa constelación de Estrellas que los llevaron a ganar la Serie Mundial de 1955.
Tal vez por eso subestimaron el talento del Cometa de Carolina y no lo subieron al equipo grande, cuando la regla de MLB era muy clara para todos los equipos, es decir, mantener en su roster a todo aquel jugador firmado por 6 mil dólares o más, so pena de ser seleccionado en un Draft por otro club.
Clemente se pasó todo el año 1954 en Triple A con los Reales de Montreal, donde no le dieron juego todos los días para ocultarlo del resto de los equipos, de acuerdo las conjeturas del propio pelotero en esa época.
Sin embargo, al llegar el Draft de la Regla 5 el 22 de noviembre de ese año, Clemente fue seleccionado por los Piratas de Pittsburgh, quienes lo debutaron en MLB al siguiente año y así inició su inolvidable carrera que terminó con 4 títulos de bateo, 12 Guantes de Oro, 15 Juegos de Estrellas, un premio al MVP, 3 mil hits y su ingreso al Salón de la Fama de Cooperstown.
Paradójicamente, el debut de Clemente en MLB se dio el 17 de abril de 1955 y lo hizo frente a los Dodgers con un imparable frente al estelar Johnny Podres en su primer turno.
Moraleja: Nunca subestimes el corazón de un campeón.
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